“La isla” es una película de ciencia-ficción que se traslada al año 2019, imaginando un fututo que, si nos ponemos a pensar, no es tan lejano. Perdón por todos los que todavía no la vieron pero para poder hacer la entrada, hablar del final es algo clave.
Un grupo de personas deciden fundar una especie de colonia totalmente cerrada al mundo exterior. El objetivo es crear, en una especie de laboratorios, clones totalmente sanos. Es decir, personas que viven en el mundo exterior, real, pagan millones de dólares para obtener un clon y, ante cualquier falla en su organismo, saben que tienen un riñón, una médula o cualquier parte del cuerpo idéntica y 100% sana. A todos los clones, cuando son creados, les lavan el cerebro implantándoles recuerdos falsos de su infancia y haciéndoles creer que el mundo exterior está contaminado y que cada uno de ellos fue elegido especialmente para una misión sumamente importante, que la llevarán a cabo cuando sean llamados a “La isla” (único lugar del planeta no contaminando). Totalmente esperanzados los clones están felices cuando son llamados a retirarse a la isla, lo que no saben es que no existe tal isla sino que simplemente es el llamado para su muerte ya que “su dueño” necesita un transplante urgente.
En el punto que me quiero centrar es cómo los clones viven en esta especie de burbuja y que, ni más ni menos nos hace recordar sobre la peste de la que nos habla Foucault. Éstos humanos no entienden absolutamente nada del mundo exterior, no conocen nada, viven en un apartado que no tiene contacto con el mundo real. Están totalmente vigilados no solo con cámaras sino también por la seguridad que el lavado de cerebro les brinda. Llevan a cabo una estricta dieta, horas de gimnasia, etc.
Ahora bien, sin duda es una película de ciencia-ficción pero no tengo dudas de que a más de uno ya se le debe haber ocurrido una cosa así para un futuro que, como dije, no es tan lejano. Tal como lo planteó Foucault hace varios años atrás, éste es un modelo de peste donde un grupo de humanos son encerrados y vigilados (control) y que llevan un estricto disciplinamiento interno. Y no solo eso sino que dichos humanos son tratados como objetos y que a nadie le importa si mueren o viven, sino el hecho de recaudar aquellos millones de dólares.
No estoy en contra de una ciencia que avanza, ahora bien, por un lado ¿crear clones simplemente para vivir algunos años más? Es decir, ¿crear humanos para luego matarlos?, ¿podrá llegar a concretarse las ideas de Focuault sobre un vigilar y castigar en un modelo de peste, en algún futuro no tan lejano?
La película lo que plantea es, como dijo Manu, un grupo de clones vigilados por un poder. En este punto podemos observar algunos puntos citados por Michel Foucault. Luego los clones serán matados para prolongar la vida del individuo real, es una vida por otra. Como también dijo Manu se crea un hombre para luego matarlo, pero si no se creara el individuo real moriría. He aqui en el futuro, pasado, presente, el individualismo y egoísmo del hombre que solo piensa en SU vida y en SU existencia. Creo que el individualimos del hombre lo lleva a cometer estas acciones y en la pelicula es un modo de reflejarlo.
ResponderEliminarMuy interesante la relación entre la película y Foucault (aunque no vi la película). Parece el relato de la creación de "cuerpos dóciles" llevada al extremo y cuya productividad estará dada para servir a la supervivencia de su original.
ResponderEliminarSin embargo, la parte en que hay un grupo de gente que planifica el control sobre los clones se aleja un poco de la idea de poder en Foucault, donde más que un engaño vemos la implantación de un poder no centralizado como en este caso.
De todas maneras es muy interesante pensar los problemas filosóficos que plantea la utilización de seres humanos (que la palabra "clon" no nos haga olvidar que son personas) como virtuales criaderos de órganos para otras personas con mucho dinero.
En este sentido se repite un poco la idea de Matrix: personas engañadas que viven en un mundo virtual y que son utilizadas como energía o alimento para aquello que los engaña.